Todos los que en alguna ocasión hemos cocinado con gas sabemos la diferencia que hay a lo hora de hacerlo en placas vitrocerámicas o de inducción y hacerlo en placas de gas.
En una cocina eléctrica nos encontramos con varios niveles de potencia, normalmente 10 o 12, pero con el gas podemos tener infinitos niveles, ya que podemos regular el fuego a nuestra voluntad, con lo que conseguimos un nivel de control que no podemos conseguir en una eléctrica. Por algo será que siempre que he visitado las cocinas profesionales me he encontrado con grandes zonas de cocción y todas ellas funcionando con gas, nunca placas de cocción eléctricas.
En una cocina eléctrica nos encontramos con varios niveles de potencia, normalmente 10 o 12, pero con el gas podemos tener infinitos niveles, ya que podemos regular el fuego a nuestra voluntad, con lo que conseguimos un nivel de control que no podemos conseguir en una eléctrica. Por algo será que siempre que he visitado las cocinas profesionales me he encontrado con grandes zonas de cocción y todas ellas funcionando con gas, nunca placas de cocción eléctricas.
A este inconveniente se le ha sumado últimamente otro no menos importante, el precio de la electricidad, que no para de subir y que resulta mucho más caro que el gas. Gas Natural estima que el cambio de la calefacción eléctrica por la de gas natural para una vivienda de 100 metros cuadrados, puede suponer un ahorro de hasta 670 euros, dependiendo de la zona climatológica donde se encuentre.
Gas Natural ha lanzado una campaña para dar a conocer el ahorro que supone ese cambio y la facilidad de su instalación. Para esta campaña cuenta con uno de los chef más mediáticos del panorama nacional, Jordi Cruz, tres estrellas Michelin y uno de los integrantes del jurado de MásterChef.
El gas natural se trata de una energía limpia y competitiva y ahora puedes solicitar presupuesto en este enlace:http://ahorrador.gasnaturaldistribucion.com/?promo=1. Además si lo haces antes del 1 de mayo la instalación te puede salir gratis.
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Entiendo la campaña, pero realmente la única ventaja del gas natural frente a la inducción (no vitro, inducción) es el precio. El gas es más sucio, menos seguro, y para ciertas aplicaciones en las que necesitamos repartir calor uniformemente, la inducción no tiene rival, y al gas hay que añadirle un difusor de calor.
ResponderEliminarEso sí, está claro que el coste diario de consumo de gas frente a la luz... hace que nos lo pensemos seriamente.