Ese es el nombre que recibe la guía que Cerveceros de España ha editado y a cuya presentación pudimos asistir hace unos días.
En el capítulo segundo nos hablan de los
recipientes recomendados. El recipiente perfecto de servicio es una copa o un vaso, pero siempre de cristal, ya que nos permitirá percibir mejor el color y el brillo de la cerveza. La copa tiene la ventaja que permite el agarre por la caña, evitando con ello que le transmitamos calor.
Con respecto al
servicio, nos recomiendan: temperatura de servicio entre 5º y 10º, dependiendo del tipo de cerveza. Recipientes fríos pero no escarchados, ya que el frío excesivo modifica el sabor y el aroma de la cerveza e impide la formación de espuma. Es aconsejable humedecer la copa por dentro, elimina resto de detergente y favorece que la cerveza resbale por el interior de la copa evitando que el líquido explosione contra el cristal y pierda parte del carbónico.
Se recomienda el servicio con una capa de espuma de entre 1,5 y 2 cm, ya que ésta hace de tapón y evita que se escape el carbónico y se mantengan los aromas y el sabor de la cerveza.
Os dejamos una ilustración con los pasos para servirla correctamente desde la botella:
En cuanto a la
presentación en cualquier establecimiento de hostelería (no olvidemos que la guía está orientada a los profesionales) recomienda que la marca siempre esté correctamente identificada ante los ojos del consumidor, que los vasos no goteen en el momento de servirse y no llenar la copa o vaso más de un tercio de su capacidad, dejando la botella con el resto del líquido cercana al recipiente donde se ha servido con la etiqueta siempre a la vista del consumidor.
La parte que me ha parecido más interesante de la guía ha sido
armonías con cerveza, es decir, que ingrediente armoniza bien con cada tipo de cerveza. Os dejo la ilustración donde se recogen estas armonías:
También se hace un resumen de las diferentes
variedades de cerveza, las cuales se dividen en dos grandes grupos según la temperatura de fermentación de los mostos, de baja fermentación o lager y alta fermentación o ales.
De
baja fermentación tenemos
Lager Pilsen,
Lager especial,
Lager extra y
Bock. Esta última también puede ser de alta fermentación.
Cervezas de
alta fermentación pueden ser
Ale,
de abadía,
negra stout o
de trigoTambién podemos tener otras como
sin alcohol o tipo
lambic o fermentación espontánea elaborada con levaduras salvajes.
Termina la guía con una breve explicación del
proceso de elaboración de la cerveza. La cerveza es una bebida fermentada de bajo contenido alcohólico elaborada con ingredientes naturales: agua, lúpulo y cebada malteada o trigo, según se trate de cerveza de malta o trigo.
Una vez cosechada la cebada y seleccionada se maltea. El proceso del malteado consiste en remojarla para hacerla germinar y en ese momento se seca y se tuesta. El malteado es necesario porque la cebada tiene poco azúcar y con este proceso se incrementa, ya que ésta es necesaria para que las levaduras actúen y transformen este azúcar en alcohol y gas carbónico. El tueste de la malta determinará el color final de la cerveza.
Los tipos de cerveza que catamos fueron Lager Pilsen, Lager especial, Lager extra, de trigo, de abadía y stout negra.
Y las armonizamos con los siguientes platos:
Lager Pilsen con gazpacho de remolacha con boquerones,
Lager especial con sushi-Makis variados,
Lager extra con tosta de tartar solomillo de buey
cerveza de trigo con pirulí de pintada y salsa de reineta,
cerveza de abadía risotto de setas al parmesano y
stout negra con trufa negra.