Hacía tiempo que no hacía nada con pasta filo y el fin de semana me decidí a hacer unos aperitivos con ella. Es muy sencillo de hacer, admite muchos rellenos y quedan vistosos. Se pueden hacer fritos o en el horno. En mi caso los hice en el horno ya que quedan más ligeros porque frito absorben más aceite.
Hice de dos tipos, unos rellenos de queso crema tipo Philaderphia y langostinos y otros rellenos de queso de cabra con mermelada de tomate.
Ingredientes:
- Pasta filo.
- Queso crema.
- Queso de cabra.
- Mermelada de tomate.
Hasta que no tengáis el relleno preparado no saquéis las hojas, ya que son muy finas y se secan enseguida y luego se rompen.
Cortamos la hoja en cuatro trozos y en cada uno de ellos ponemos una cucharada de queso crema y uno o dos langostinos. Cerramos formando un saquito y lo atamos con algo para que no se salga. Lo más vistoso si tenemos es poner cebollino o el vede del puerro. Pincelamos con mantequilla derretida.
Para los de queso de cabra he puesto un trozo de queso y una cucharadita de mermelada de tomate.
Hornear a 180º sobre 10 minutos.
Si al hornearlos se rompen podéis poner las hojas dobles. Pinarla con mantequilla o aceite entre una y otra.
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